¿Se puede seguir viajando en tiempos de dólar caro? Obvio que sí. ¿Es complicado? Para nada. Solo necesitas dar prioridad a otros destinos, si es que ganas en moneda débil, como es mi caso. De eso va este post.
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Viajar en pesos colombianos
Por la venia que a veces hacemos de lo extranjero, nos perdemos de conocer nuestro propio país, y la verdad es que en Colombia hay taaaaaanto por ver, que realmente no alcanza el tiempo para visitarlo todo. Además, con un dólar caro, un euro aún más – y un «corralito» viajero autoimpuesto-, es la perfecta oportunidad para conocer destinos nacionales. Los típicos: la capital, la costa Atlántica, Medellín, el Eje Cafetero, etc. etc. Y los no tan típicos: avistar ballenas en Nuquí, conocer la selva amazónica en Leticia, ver el amanecer en los Llanos orientales, caminar en el desierto de la Guajira, admirar los colores de Caño Cristales, hacer deportes extremos en Santander (haciéndole propaganda a la «tierrita», jejeje)…
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Salir del país hacia otros con monedas depreciadas
La depreciación del real, por ejemplo, fue un incentivo para ir a Brasil este año. Hice el cambio del peso colombiano al real directamente, por lo que perdí menos plata que si hubiera cambiado peso-dólar, dólar-real.
Si vas a México, haz lo mismo: cambia directamente a la moneda local, en vez de usar el dólar caro.
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Aprovechar la escasez de otros
El dólar caro afecta si salimos a destinos fuera de Colombia y de Latinoamérica, pero si vamos a lugares donde la moneda está escasa y fuertemente controlada, el «golpe» será sólo en el pasaje porque el costo de vida igual saldrá mega-barato. Argentina, con una tasa oficial que casi nunca aplica y otra que es la más extendida y la más cara, la del dólar blue o dólar paralelo, se perfila entonces como el ejemplo perfecto.
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Viajar sin visa
Incluso si el destino es caro por lo turístico, si no hay que sacar visa, nos ahorramos una buena cantidad de ‘plata’. Esto, porque las visas suelen estar tasadas con referencia al dólar.
Uno de estos ejemplos es Mexico. O países de Sudamérica.
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Ahorrar costos
Si definitivamente hay que salir y usar ese dólar caro (como moneda final), podemos hacer algunos ahorros básicos en los gastos. Por ejemplo, en cuanto a estadía, quedarse donde amigos o hacer Couchsurfing es una opción. O si escogemos hostales, podemos cocinar en vez de comer en restaurantes fuera. Hacer pequeños trabajos, como dar algunas horas de clase de español a cambio de estadía, se convierten en otra solución. O hacer voluntariados.
Con la tarjeta internacional de estudiante se obtienen igualmente algunos descuentos, así como los bonos de comida que vienen con periódicos gratis en la calle.
¡Esas son mis opciones para tiempos de crisis, y para no dejar de viajar! ¿Cuáles son las tuyas?
Hola! Pasaba por tu blog para decirte que eres merecida ganadora de un Liebster Award. Puedes pasar por mi blog y reclamar tu reconocimiento. ¡Felicitaciones!
Enlace del premio: https://ciudadelapoetica.wordpress.com/2016/03/22/un-galardon-mas/
Mil gracias!!!! Le echaré un ojo a tu otro blog cuando regrese del Fin del Mundo, Putumayo!!! Jajaja. Abrazo!